La naturaleza soriana, nuestra salud y el agua que bebemos, y que corre por los ríos y manantiales está amenazada por la Ganadería industrial.
Apoyamos un modelo de ganadería extensiva ajustada al entorno en que vive; que cree empleos y proporcione alimentos de calidad, proteja la biodiversidad y sea compatible con futuros desarrollos sostenibles del mundo rural y el asentamiento de la población.
La ganadería industrial presenta graves impactos en los territorios, tanto en el medioambiente, económicos como en la salud pública y, lógicamente, en el bienestar animal.
Denunciamos el modelo agroindustrial, que sólo beneficia a unas pocas grandes empresas y es muy agresivo con el medioambiente natural y humano.
En consonancia con todas las directivas europeas deberíamos reducir las emisiones de CO2 (incompatibles con la ganadería a gran escala), proteger las aguas disminuyendo el vertido de nitratos (imposible por el exceso de vertidos de purines y por la sobre explotación de la tierra), conservar la biodiversidad y los ecosistemas, así como desarrollos sostenibles …
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